Carla Brugo
Carla Brugo ( Entre Ríos, Argentina)
Es ilustradora y diseñadora de objetos. Durante su residencia desarrolló su proyecto de ilustración en los talleres de María Colombo y Fátima Pecci. Éste consistió en una serie de pinturas de fachadas de casas y departamentos que encontró durante sus recorridos en la ciudad. Para ella las fachadas cuentan una propia historia, en su búsqueda las abstrae de su contexto urbano y las ubica en espacios indeterminados que hacen inevitable la comparación con los espacios ambiguos de la pintura metafísica. Como cierre de residencia su trabajo se mostró junto las obras de artistas locales en Espacio MODOS en el barrio de Palermo.
Texto Curatorial.
Carla Brugo proviene de una ciudad del interior de Argentina donde su geografía - entre ríos- delimita de cierto modo el comportamiento en cada ribera.
Brugo toma el lápiz para alzar la voz y señalar lo que acontece, invitándonos a sentirnos parte de la realidad que allí se representa.
Hay preciosismo en la elección del formato, donde a través de sus líneas y colores, da lugar a una atmósfera auténtica. Se siente ella misma en el oficio y pese a los contratiempos -geográficos, sociales y culturales- persisten en la construcción de un cuerpo de obra sólido y coherente.
Brugo con actitud contemplativa, plasma su mirada como espectadora de la escena. Es apresurado precisar lo que ha recibido durante esta breve residencia en Buenos Aires. Sin embargo, ha llegado a apreciar a los artistas con quienes trabajaron por la generosidad y calidez recibidas en los momentos compartidos.
Brugo se sintió segura para definir un cambio de soporte, al trabajar con María Colombo (quien genera sus esculturas a partir de hojas de revistas viejas). Mientras que por parte de Fátima Pecci recibió una prueba de responsabilidad cívica y social, imprescindible y alentadora en este punto para su obra.
Brugo se expresó y se representó en las obras. De cierto modo y desobedeciendo las instrucciones de Yoko Ono, decidió no desaparecer en sus dibujos. Por el contrario, encontró en ellos el lugar donde fluya la memoria.
Silvina Amighini